www.guillermordriguez.net La promesa de algún feliz año: ¡Exterminaremos el malandraje político!
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Los gobiernos que han regido
Venezuela desde 1958 hasta la fecha han destruido en 40% del capital que existía en el territorio que gobernaron. Con matices menores, todos defendieron la misma filosofía, aplicaron las mismas
políticas y cada uno profundizó y amplió los daños de su predecesor. Los resultados de la filosofía y las políticas estatistas
y colectivistas están a la vista, pero la mayoría de la población sigue aplaudiendo el estatismo colectivista. LA
ADECA DEL VECINDARIO En Venezuela teníamos dos
tipos de adecos, los blancos y los verdes, los primeros eran marxistas evolucionistas abiertamente. Los segundos eran lo mismo
pero escondidos tras las sotanas. Ahora tenemos, al menos, dos tipos más: Los chavidecos, que se cansaron de obedecer ciegamente
al CEN y esperar que el partido hiciera milagros repartiendo sin que nadie produjera para obedecer ciegamente al Comandante
Chávez y esperar lo mismo de siempre. Hay otros que son adecos a escondidas, pero en lugar de sotanas se han buscado diferentes
parapetos para medio esconder su adequidad, esos se autodenominan "la sociedad civil" y se organizan en -inumerables y minusculas-
ONG´s. Todo marxista de Venezuela
que no sea estrictamente leninista y que pretenda hacer la revolución, de a poquito, y con el mínimo de violencia, no es otro
cosa que un adeco, por ello es que tenemos hoy el más adeco de todos los gobiernos desde 1945. En el mar del rebrote del
aprismo, renovado como nunca, con el ecologismo y la anti globalización, Venezuela sigue siendo la adeca del vecindario. CAMBIOS
GATOPARDIANOS Así, vemos que la caja negra
de PDVSA se hace más obscura que nunca cuando se venden refinerías con el mismo secreto que se compraron. ¿Buen o mal negocio?
No se sabe, y no se sabe porque es secreto, pero el que los gobiernos manejen empresas mercantiles "en secreto" rara vez los
negocios salen buenos para alguien diferente del que los firma. Aumenta la deuda pública,
aumenta el gasto corriente, el Estado incumple compromisos, la delincuencia crece, el PIB se reduce año a año, el gobierno
monta más empresas y se queja amargamente con campañas publicitarias de que en el pasado se vendieron algunas. El capital
que se genera en un sector petrolero estatizado, cuyo aporte fiscal sigue cayendo, se reparte en actividades improductivas
para obtener apoyo político mientras la población a la que se está empobreciendo aplaude. Pero no todos aplauden, millones
de personas firmaron solicitando un referéndum revocatorio al Presidente. El 98% de sus líderes defienden las mismas filosofías
y proponen las mismas políticas que el actual gobierno. Aplicadas por ellos y sus seguidores aplauden. EL
CONSENSO MALANDRO Hay un gran consenso balandro
en el saqueo pasado, presente y futuro de la república en beneficio de los gobernantes, con el respectivo reparto de las migajas
para los votantes. Los que llegan al poder por
primera vez son más generosos con el tamaño de las migajas. Por eso ganan. Pero la destrucción del capital de la población
por medio de la regulación y estatización del capital productivo, la inflación y la devaluación es la misma. Lo resultados
son los mismos y pobreza es la misma. Cada vez peor, porque cada vez el punto de partida esta más abajo. Y más importante
aún sin fondo, porque una importante diferencia entre los países y las piscinas es que los primeros no tienen fondo. Claro
que el futuro puede ser peor. Y mucho peor. Tanto con Chávez, como con otro neo adeco de cualquier ralea. La solución no está en los
"lideres" sino en el pueblo. Sólo cuando la mayoría del pueblo entienda que su problema es que al votar por quien ofrece repartir
lo robado se está llevando malandros al gobierno. Y que todos los malandros robarán a quienes los eligieron. La mayoría del
pueblo borrará de la faz de esta tierra el malandraje político de toda especie y color. Trabajamos por eso más que cualquier
otra cosa, porque sólo entonces tendremos realmente un feliz año nuevo y una feliz vida nueva. Pero eso es sólo el principio. |
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